El amoníaco o las pastillas contra el parkinson han entrado a formar parte de las drogas de diseño en la ciudad. Una denominación que no gusta a los especialistas de la Unidad de Drogas y Crimen Organizado (UDICO) de la Policía. Creen que su falsa connotación de modernidad confunde a los chavales de 14 y 15 años que empiezan a consumirlas cerca de algunos after. Ellos no saben lo que puede hacerles una sustancia, el éxtasis, base de las conocidas “Mitsubishi” y “Pollas voladoras”, las más consumidas en Vigo. “Estas pastillas, son elaboradas por legos que varían su fórmula pensando sólo en su beneficio”. Ahí está el peligro: en la dificultad de intervenir en su tráfico, y en la entrada hacia otras drogas como la cocaína.
POCO DISEÑO Y MUCHO PELIGRO
Todas las drogas de síntesis tienen como base el éxtasis (MDMA), un derivado de laanfetamina. Su elaboración es barata. También su precio final: no pasa de los 6 euros.
Taquicardia, hipertensión , convulsiones, visión borrosa, distorsión de los colores, vómitos o crisis epilépticas, son algunos de los efectos que producen y que llegan a persistir 24horas después de su consumo.
Los ingresos clínicos por psicosis provocadas por el consumo de este tipo de drogas se incrementaron un 400% en 9 años. Más de 4.000 personas son hospitalizadas anualmente en España por esta causa.
PASTILLAS DEL PARKINSON CONTRA LOS EFECTOS DEL ÉXTASIS
Sinemet es un medicamento que se prescribe en los tratamientos de la enfermedad de Parkinson. Aunque el número de incautaciones y casos detectados de uso de este medicamento por consumidores de drogas de diseño “no es significativo”, se sospecha que quienes lo ingieren lo hacen con la falsa creencia de que reduce los efectos de otras sustancias, en especial la sensación de euforia. El Sinemet sólo puede conseguirse legalmente con receta médica, pero es relativamente sencillo comprarlo por Internet.