En total, 1.847 víctimas de explotación sexual identificadas entre 2005-2008, casi el 96 por ciento de ellas de origen extranjero. Este es el resultado de las 460 operaciones llevadas a cabo en Galicia por la Guardia Civil en clubes de alterne y las 59 redes de tráfico de mujeres desarticuladas por la Policía Nacional. Aunque el perfil de la víctima va cambiando: si en este tiempo el 51,4% de las identificadas eras brasileñas, el 13,15% colombianas y el 12,4% rumanas, entre las 141 mujeres identificadas en lo que va de 2009 el 39 por ciento ya eran rumanas y sólo el 29% brasileñas. Además, sólo el 14% de ellas estaba en situación regular.
Unas cifras escandalosas que, sin embargo, desembocan pocas veces en un proceso judicial ya que rara vez las víctimas denuncian la situación por miedo a las represalias o a ser repatriadas. Por eso, el año pasado de los 29 delitos asociados a procedimientos relativos a la prostitución sólo se pudo formular acusación en ocho. Y para ser más eficaces se está desarrollando el ‘Protocolo de actuación institucional sobre adopción de medidas de prevención, investigación y tratamiento a las mujeres víctimas del tráfico de personas con fines de explotación sexual’, un documento pionero en España que contará con una parte relativa a derechos y obligaciones de las víctimas, otra sobre el régimen penal y otra sobre el programa de prevención, acogimiento y asistencia, que incluirá un estatuto especial para las víctimas.
Conoce cómo Vigo se suma al Día contra la Explotación Sexual.