Los trabajadores de Alfageme están más optimistas. La clave es que al término de la reunión con representantes de la empresa ellos parecieron acceder a una de sus revindicaciones: renovar la cúpula directiva.
Ésta era una de las condiciones que imponían los sindicatos para apoyar el plan de viabilidad que, además del acuerdo entre las partes, incluye un aval de 9 millones de euros que ha sido solicitado al Instituto Galego de Promoción Económica (Igape). Sin embargo, el representante de este organismo no acudió a la reunión, circunstancia que sentó malestar entre los trabajadores.
Ahora les espera negociar las “garantías laborales” que tendrán aquellos que conserven su puesto.