Carta informativa
Lo que han recibido los vecinos por correo certificado es un documento en el que Zona Franca, fechado el 2 de septiembre de este año, en el que se les informa de que “a través de un Convenio de colaboración con el Concello de Vigo” está desarrollando el sector S-44-I de la ficha del PXOM, parque empresarial de Matamá-San Andrés-Valadares.
“Una de las primeras fases des desarrollo del parque consiste en identificar a los actuales propietarios de las fincas (en negrilla en la carta original) que se encuentran dentro del límite de la actuación”. Para ello Zona Franca contrató a la empresa Nortagro que desarrolló esos trabajos de cartografía, topografía y elaboración del ámbito del desarrollo del parque empresarial entre noviembre de 2008 y agosto de 2009.
Al final de la comunicación se informa al interesado que, según los datos el propietario de la parcela señalada que tiene una superficie de tantos metros cuadrados y se encuentra en dicho polígono.
En el mismo certificado se incluye una carta de Rosa Eguizabal Gándara, directora de Gestión de Suelo de Zona Franca en la que se pide a aquellos propietarios que quieran vender sus fincas que entreguen copia del título de propiedad “escrituras, testamento, nota simple” y se ofrece la posibilidad de enviarlo por correo postas al Consorcio de la Zona Franca o por correo electronico a [email protected].
La misma carta indica “en caso de discrepancia entre la superficie que aparece en el título de propiedad y lo medido por la empresa topográfica NOTAGRO, prevalecerá la realidad comprobada por los topógrafos” (en negrilla en el original).
Este proceso, según ha confirmado un especialista en urbanismo a vigoalminuto, es sólo el primer paso de un proceso que debe seguir con la elaboración de un proyecto parcelario, una vez identificados los propietarios, que debe ser aprobado por el Concello; al mismo seguirá el comienzo de los expedientes de expropiación, que también debe ser confirmado por Urbanismo municipal.
Todo el procedimiento podría durar no menos de dos años antes de que empezasen a expropiarse los terrenos y otro tanto antes de la resolución de los posibles recursos. Una fecha no tan descabelada, pues el Consorcio no prevé empezar las obras hasta el año 2012.
