1.847 mujeres explotadas sexualmente. Esa fue la cantidad de ’esclavas’ que localizaron Policía Nacional y Guardia Civil en Galicia entre 2005 y 2008. Ese es uno de los datos de la Memoria de la Fiscalía de Galicia que se presentó hoy. Ambos cuerpos realizaron 519 intervenciones en clubes de alterne incluidas infiltraciones en redes que introducían a estas mujeres en Galicia. Además, las Fuerzas de Seguridad han descubierto organizaciones que traen a brasileñas y rumanas a petición de ciertos dueños de clubes.
Prácticamente el 100% de las víctimas eran extranjeras, más de la mitad brasileñas, un 13% colombianas; el 12%, rumanas; el 10,6%, del resto de Europa; y el 3,2%, africanas. El fiscal general de Galicia, Carlos Varela, explicó en el Parlamento que la mayoría de las mujeres son obligadas a prostituirse en clubes de carretera, como acompañantes de lujo o en pisos y que sólo las más desamparadas tienen que hacerlo en la calle, especialmente en la provincia de Pontevedra.
Las llegadas a Galicia son escalonadas y se hacen desde terceros países, en el caso de las brasileñas, vía Lisboa, París y Madrid, con destino Vigo, para beneficiarse de la libre circulación dentro de la Unión Europea, y desde nuestra ciudad a otros puntos de la comunidad, lo que nos convierte “en punto de destino de las rutas internacionales”.
