Ayer los testigos de la acusación sólo pudo reconocer a 3 de los detenidos y, hoy, los testigos de la defensa exculparon a 10 de los encausados por los disturbios que se produjeron con motivo de la huelga del metal en la estación de Renfe de Vigo en mayo de 2006. En la sesión final del juicio, los testimonios situaron a casi todos los acusados lejos del lugar de los altercados y sólo dejan sin coartada a Juan Alberto A.R., Óscar J.C. y Fernando D.P.
Uno de los fotógrafos de prensa que esos días cubría la huelga del metal acudió como testigo de la defensa al haber presenciado el arresto “brusco” de Juan Alberto A.R. en la calle Puerto Rico por más de media docena de agentes mientras pedía que no pegaran al detenido y que recordaran que se estaban tomando imágenes de todo. El testigo aseguró que no presenció ningún lanzamiento de vallas o piedras y que los manifestantes respondieron levantando los brazos cuando los antidisturbios intentaron impedir su entrada en la estación de tren.
Fue durante esta secuencia, cuando el fotógrafo atestigua haber visto a un policía levantar la porra y a otro agarrar a un manifestante que estaba en medio de la protesta, a lo que otro trabajador respondió cogiendo por detrás al agente y tirarlo al suelo. El resto de los testigos, 9 y todos amigos de los acusados, coincidieron en exculparlos.
La petición de penas difieren mucho entre acusación y defensa. Mientras los tres abogados que representan a los detenidos piden la libre absolución o la pena mínima porque no se han acreditado los cargos, el Fiscal mantiene su petición inicial.