“Todo el mundo tiene derecho a una segunda oportunidad”. Y eso es lo que pidieron los padres del niño con obesidad mórbida a los servicios sociales de la Xunta, que se han hecho cargo de su tutela. “Si corre algún riesgo, lo entrego, pero que me dejen llevarlo al médico para que valoren al chaval”, manifestó Luis Montolla tras anunciar que presentarán un recurso administrativo contra la resolución del Gobierno autónomo.
Los servicios de la Xunta, que siguen el caso desde hace cuatro años, tomaron esta medida tras estudiar un informe médico después de que el niño fuese atendido por insuficiencia respiratoria grave. En esa fecha pesaba 81 kilos y medio y no abría los ojos porque tenía los mofletes hinchados por lo que, durante tres meses tuvo que usar unos aparatos para que pudiese abrirlos.
El niño come comida cocida, a la plancha y verduras
El chaval logró adelgazar 10 kilos, después de seis semanas de dieta, bajando hasta 70 kilos y medio. Es precisamente a esta pérdida de peso a la que se agarra su padre para reclamar que se le devuelva a su hijo.”Ya se conforma con la comida que le damos, seguirá adelgazando”, aseguró su madre, Margarita Gabarres quien detalló que ahora come “cosas cocidas, a la plancha y verduras”. También aseguró que hace ejercicio.
El abogado de la familia anunció que solicitará la suspensión provisional del internamiento del menor en el centro de A Carballeira , ahora el menor está con unos familiares, y presentará un recurso basándose que no hay abandono, malos tratos o situación alguna que pueda implicar un deterioro de su integridad.
