En Galicia no hay osos para echarse a correr, pero sí jabalíes estresados y con ganas de sangre… Ni varios dardos anestésicos consiguieron calmar al jabalí ‘híbrido’ que mató a una vaca en una granja de Arzúa y atacó a otra. El animal era un auténtico peso pesado, 120 kilos ni más ni menos, y ante su persistente alteración tuvieron que sacrificarlo.
La bestia movilizó a un agente de Conservación de la Naturaleza y agentes de la Guardia Civil y de Protección Civil de Arzúa, tal y como confirmó en un comunicado Medio Rural.
El cuerpo del especimen fue trasladado al Centro de Recuperación de Fauna Salvaje de A Coruña porque presentaba, al parecer, rasgos morfológicos de ‘hibridación’ y quieren estudiarlo.
Hasta los expertos confirmaron que hay que analizarlo bien porque semejante mala leche casi resulta paranormal.