Educar…empezando por los mayores
Esta es la solución que proponen los especialistas
aconsejan que sean pacientes, que feliciten al niño cuando coma lo que debe, que le acostumbren a poner la mesa, hacer un menú y probar todos los alimentos y que no hagan de la hora de la comida un tema grave, sino que le quiten importancia para que comer de todo sea algo normal.
Cuatro de cada diez niños gallegos menores de 10 años comen mal y, encima, el 12% de ellos están gordos, nueve puntos más que la media estatal. Eso asegura el Observatorio de Nutrición Infantil que detalla que los niños pontevedreses son de los que peor se alimentan, pues más de 34.000 o comen poco, o no lo hacen con la suficiente variedad.
Según los pediatras, esta circunstancia, que se produce a partir de los 3 años de vida, afecta a la salud del niño, prueba de ello es que el la mitad de los que comen mal son alérgicos o asmáticos. Se sabe que un niño no come bien a partir de los 2 años y a los 10 ya lleva, al menos 5 sin alimentarse adecuadamente. Los pediatras señalan a los adultos como los principales culpables ya que se dejan presionar por las rabietas de sus hijos a la hora de comer y no les obligan a tomar lo que les conviene, además intentan evitar las discusiones que se producen en el almuerzo entreteniendo a los chavales con la televisión, algo que los médicos consideran muy inadecuado y que reconocen que hacen el 75% de los padres.