El partido empezó tan frío como el tiempo, con un Celta más interesado en llevarse el encuentro desde el primer pitido, haciéndose con el balón, la iniciativa y las ganas, y con el Nàstic metido en su campo. Pese a ello, los gallegos no generaron ninguna ocasión de gol hasta pasado el minuto 13, algo que no bajó la moral de los hombres de Eusebio Sacristán que se empeñaron en hacerse con el partido, aunque fuese con ocasiones a balón parado.
Y la persistencia tuvo su recompensa: a los veinte minutos Trashorras lanzó una falta magistralmente que tras ser rechazada de manera acrobática por Rubén dejó el balón muerto para que Toni metiese un obús que subió el 0-1 al marcador. Debió de ser el fogonazo del jugador celeste el que dejó sin luz el estadio, circunstancia que no impidió seguir el juego, pero que sumió en la penumbra al Nástic.
En el minuto 36, Joselu rozó el balón sacado en falta a la izquierda de la meta catalana y el balón se coló mansamente en la red subiendo el 0-2 al luminoso.
El resto del encuentro no tuvo más historia, el Celta siguió dominando y esperando que llegara el 0-3 y el Nástic, entregado, soportaba los silbidos de su propio público que empezó a abandonar el campo muchos minutos antes de que Pino Zamorano pitase el final.
Ficha técnica:
0 – Gimnàstic: Rubén, Fachán (N’Gal, m.66), Medina, Jorge, Cherfa, Bauzá, Miguel Ángel (Roberto, m.46), Campano, Morán, Vicente (Walter, m.46) y José Mari.
2 – Celta: Falcón, Hugo Mallo, Noguerol, Jordi, Roberto Lago, López Garai, Bustos, Saulo (Botelho, m.66), Trashorras (Abalo, m.90), Toni (Jonathan Vila, m.85) y Joselu.
Goles: 0-1, Toni (m.20); 0-2, Joselu (m.36).
Árbitro: Pino Zamorano, del colegio andaluz. Expulsó con roja directa a Campano (m.83) y a Joselu (m.89). Mostró cartulinas a Noguerol, Rubén Pérez, Roberto Lago, Medina, Botelho y Toni.