CIG y STEG han convocado una huelga este jueves 21 de enero para protestar contra el decreto de regulación del uso del gallego en las aulas y los directores de los centros educativos no universitarios no podrán secundarla. Esta es una de las medidas que ha decretado la Xunta para garantizar los servicios mínimos en los distintos centros, en los que deberá haber personal designado por el director para velar por la seguridad de los menores durante la jornada.
En caso de no respetar los servicios mínimos, el centro podría ser sancionado sin que suponga ninguna limitación de los derechos que la normativa reguladora de la huelga reconoce.
El decreto
El borrador de la nueva normativa establece que a el curso que viene empezará a aplicarse un modelo trilingüe en el que los padres de los alumnos votarán en qué idioma se impartirá cada asignatura, aunque tendrá que haber un equilibrio entre las horas de castellano y gallego y, poco a poco, se implantará el inglés hasta que represente un tercio del total de las horas lectivas. Algunos colectivos le han declarado la guerra al decreto de la Xunta y ya han animado al profesorado a seguir impartiendo las clases en gallego.
En Vigo pedirán que se retire
El grupo municipal del BNG de Vigo pedirá en el pleno del próximo lunes que la Xunta retire el borrador del decreto del plurilingüismo, basándose en que es el mayor ataque que ha sufrido el gallego, robándole horas para dárselas al inglés, y en que “no respeta” el consenso que existía en Galicia sobre la lengua.
Los nacionalistas también instarán a la Xunta a cumplir las obligaciones estatutarias de normalización lingüística de Galicia en todos los planos de la vida pública” y a establecer un sistema educativo que garantice la igualdad de competencia entre el gallego y el castellano.