La falta de interés en la cinta de ciencia ficción “Avatar” es, según la versión oficial anunciada hoy en China, el único motivo por el que la película desaparecerá del cartel de la mayoría de cines del país.
“Se trata de una decisión puramente comercial, pues el público ya no quería ver la versión de la cinta en salas no equipadas con tecnología 3D“, dijo en Pekín un portavoz del departamento estatal para radio, cine y televisión, quien añadió que el país tiene 1.700 cines con más de 4.000 salas, de las que sólo 500 disponen de tecnología 3D.
Sin embargo la causa de la retirada de la superproducción podría ser otra: el paralelismo entre la violenta expulsión del pueblo Na’vi en la ficción y la cruda realidad de los desahucios sufridos por muchos ciudadanos chinos. Varios foros de Internet apuntaron ayer que la retirada de “Avatar” se debía, por un lado, al intento de frenar la competencia hollywoodiense a filmes patrios y, por otro, al temor por que reavivara el doloroso recuerdo de cómo muchos tuvieron que abandonar sus hogares para dar paso a proyectos inmobiliarios.
“Avatar” será sustituida en los cines convencionales por la producción nacional “Confucio