Un estudio pionero que recopila la información social y económica sobre la arqueología para elaborar una base de datos sobre la oferta de servicios de este mercado. Es la ‘I Encuesta nacional dirigida a empresas de arqueología comercial’, realizada por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y dirigida por la coruñesa Eva Parga-Dans.
Y de ella se deducen datos muy interesantes, como que Galicia, con 22 empresas, es la sexta comunidad con más entidades dedicadas a la arqueología tras Andalucía, Cataluña o Madrid. Al margen de A Coruña, la cuarta provincia española con mayor densidad de este tipo de empresas (14), Lugo (1), Ourense (3) y Pontevedra (4) tienen una densidad de entre el 3 y el 7,3 por ciento.
El 40 por ciento de estas empresas se constituyó entre 2000 y 2005, años de bonanza económica y cuando se terminó de publicar la legislación por comunidades autónomas en materia de patrimonio. A partir de ese momento la creación decae hasta un 5% y, aunque hay un pequeño repunte del 8% en 2007, vuelve a descender en 2008 a un 4%, lo que puede interpretarse como un posible efecto de la crisis económica.
La mayoría no llegan a los 75.000 euros
Los problemas económicos, el acceso a la financiación y la gestión de los recursos económicos son, para los encuestados, lo que más dificulta el desarrollo. El volumen de facturación también es importante, ya que un 5 por ciento factura menos de 10.000 euros anuales, el 30% entre 10.000 y 75.000 euros y sólo un 10% por encima de los 500.000 €.
El porcentaje de la actividad arqueológica en dicha facturación es elevado: un 57% lo sitúa entre el 80 y el 100% y un 18% entre el 60 y el 80%. El personal de estas compañías también ha sido objeto de análisis. Un 67% tienen un empresario con estudios universitarios; un 20% tienen empresarios con estudios de tercer ciclo; un 7% son doctores y un 0,5% de los socios tienen estudios de secundaria o inferiores. Se ha constatado también el 31% no tiene empleados indefinidos y el 60% asegura realizar o fomentar la formación.
Entre los clientes, el 37% son empresas de infraestructuras; el 21% inmobiliarias; el 17% administraciones de patrimonio y el 11,3% departamentos de otras administraciones. Además, el 84% de las empresas aseguran no percibir ningún tipo de ayuda o subvención de ninguna administración pública, mientras que sólo un 10% dice recibir subvenciones o préstamos de las administraciones autonómicas.
Se recogieron datos de 273 empresas, con un índice de participación fue del 78%, que permite trazar, por primera vez, el perfil de las empresas españolas que centran su actividad en temas arqueológicos, así como elaborar elaborar requerimientos del sector en materia de innovación y transferencia de conocimiento.