Ha llegado el buen tiempo y, con él, los piratas. Aprovechando las buenas condiciones del mar, dos barcos piratas atacaron sobre las 08 horas de esta mañana al buque vasco ‘Albacan’ con granadas cuando se encontraba a 350 millas de Kenia. El atunero, con tripulación gallega y seguridad privada a bordo, sólo sufrió pequeños daños con este intento de secuestro, ya que el impacto de la granada provocó un pequeño incendio que fue controlado rápidamente.
El llevar seguridad privada en el barco ha provocado que los piratas ya no intenten acercarse a los barcos, sino que intentan hacerse con él por la fuerza y de forma más drástica, como en esta ocasión.
Secuestros
El último secuestro importante en las costas de Somalia se produjo hace ya seis meses, cuando un barco pirata retuvo durante 47 días al atunero vasco ‘Alakrana’, también con tripulación gallega. Los 16 marineros retenidos fueron puestos en libertar tras un tira y afloja en las negociaciones, el pago de un rescate que se estima en 4 millones de euros y 500.000 euros de desperfectos en el buque.
Aunque no supuso la calma, ya que durante el regreso a tierra fueron atacados por otro barco pirata. Fue en ese momento cuando el Gobierno permitió a los atuneros que llevaran seguridad privada a bordo para intentar repeler estos ataques. En el proceso fueron detenidos dos piratas, para los que la Fiscalía pedía 200 años de cárcel.
No fue el caso más sangrante: en diciembre los piratas liberaban al carguero griego ‘Ariana’ tras 7 meses de secuestro en Mogadiscio con 24 tripulantes a bordo. El rescate en esta ocasión fue de 3,5 millones de dólares.
