La Xunta quiere acabar con la sanidad pública y aplicar en Galicia el mismo modelo que se está usando en Madrid o Valencia. Esa es la conclusión de la Plataforma pola Defensa da Sanidade Pública, que ha hecho un nuevo llamamiento a la población para que acuda a la manifestación convocada en Vigo el próximo día 25 (Vía Norte 20 h.).
Sus representantes denunciaron que el gobierno Feijóo ha iniciado una política de privatización de los grandes hospitales, “empezando por los de Vigo y Pontevedra”, que es el paso más decidido hacia la “destrucción del carácter universal y equitativo” de la sanidad pública. Sus dirigentes acusaron al presidente de la Xunta de “estafa política” ya que durante la campaña electoral de las Elecciones Autonómicas no mostró su opinión contraria a los planes de construcción del nuevo hospital de Vigo, “que tanto el gobierno bipartito como los principales sindicatos aceptaron que fuese completamente público, en su financiación y dirección”.
La Plataforma señala que el Servicio Galego de Saúde no sólo está degradando la atención y el servicio de los hospitales y centros de salud públicos, sino que “apoya y financia la construcción de centros privados”. El primer ejemplo es el nuevo hospital de Vigo en el que se entregará su gestión y su dirección a varias empresas a las que “habrá que pagar 50 millones de euros al año” y que controlarán aspectos tan importantes para la atención sanitaria como la alimentación “a través de los servicios de cocina y catering que se sirven a los pacientes”, o la limpieza, “que es fundamental en la atención a los enfermos”. A este respecto recordaron el ejemplo del Reino Unido en cuyos hospitales ha aparecido un virus que se creía erradicado y que se debe a la “deficiente limpieza de las habitaciones, salas de espera o quirófanos, causada por la reducción de personal de este servicio a menos de la mitad del que había antes de que se iniciase la privatización del Sistema Británico de Salud”.
En opinión de la Plataforma, el siguiente paso en esta política privatizadora será decir que no es posible asumir su coste y aprobar un sistema de “copago” que obligará a los ciudadanos a pagar por determinados servicios. Entre ellos citaron los de urgencia, laboratorio de análisis o radiología, una posibilidad que “ya está siendo estudiada” por los responsables de la Xunta.
Los miembros de esta asociación indicaron que los primeros pasos ya se han dado y señalaron varios: el cierre del Xeral, Cíes y Rebullón, “lo que supondrá la pérdida de unas 1.000 camas, un número que, curiosamente, coincide con las no adscritas en el nuevo hospital”; también indicaron que se están trucando las listas de espera, “ya que hay decenas de personas a las que, para que no figuren en las mismas, no se les da una cita” e indicaron que ello se hace en servicios como urología y oftalmología; el hecho de que un centro como el Meixoeiro, que tenía que ser un centro de referencia en oncología, ya no vaya a centralizar esta especialidad o que el hospital que se va a construir no tendrá un centro de investigación, como se había proyectado.
Llamada a los ciudadanos
Por todos estos motivos pidieron a los ciudadanos que se movilicen, que salgan a la calle para dejar claro su rechazo a la intención de la Xunta de que paguen más por la sanidad quienes más la necesitan “y no quienes más tienen como hasta ahora”. Asimismo, denunciaron que se están “boicoteando” sus actos de protesta y señalaron la retirada de más de 50 pancartas que habían colocado por toda la ciudad para llamar a los vigueses a participar en la manifestación del jueves que viene y rechazaron que, “como publicaron determinados medios de comunicación” insultasen o agrediesen al gerente del Complejo Hospitalario Universitario de Vigo (CHUVI).