El obispo Magee es la última ‘víctima’ de los abusos sexuales en la diócesis de Cloyne, en Irlanda. El Papa ha aceptado hoy su dimisión como obispo de la misma después de que fuese acusado de no haber sabido gestionar estos casos de pedofilia. Según una nota difundida por el Vaticano, la renuncia de Magee, de 73 años, se ajusta a lo que estipula el artículo 401 párrafo 2º del Codigo Canónico “se pide al obispo diocesano que presente la renuncia de su oficio si por enfermedad u otra causa grave quedase disminuida su capacidad para desempeñarlo“.
Magee, que fue secretario de Pablo VI, Juan Pablo I y Juan Pablo II pidió perdón a las víctimas después de enterarse que Benedicto XVI había aceptado su renuncia.