Esta noche nos ‘comeremos’ una hora. A partir de las 02 horas de esta madrugada deberemos cambiar todas las manecillas de nuestros relojes a las 03 horas para adaptarse al nuevo horario de verano, con el que se intenta conseguir un ahorro de energía. Este cambio de hora, que se lleva haciendo desde 1981, es obligatorio en todos los países de la Unión Europea desde hace nueve años.
Para los gallegos, situados ya en otro meridiano, este ahorro apenas será de un 1 por ciento en casa y de un 3 por ciento en el sector servicios, lo equivalente a 6.500 toneladas de petróleo y un 0,37 por ciento menos de uso de energía. En el resto del país el cambio se notará más, por eso hace años que se intentó que Galicia tuviera siempre una hora menos que el resto del Estado, como en Canarias.
Esta medida de ahorro comenzó a generalizarse en el mundo con la crisis del petróleo de 1974, sin embargo, de nada sirve si no se hace un uso racional y responsable de la energía encendiendo las luces sólo cuando sea necesario, utilizando bombillas de bajo consumo y aprovechando al máximo la luz natural en los edificios y fábricas y utilizando.
