Si en algo perdió tiempo fue en forzar las puertas, ya que lo hizo con la de acceso al campo de fútbol de Candeán, con la de la cantina y la del almacén. El joven, de 25 años y con dos detenciones anteriores, se llevó cajas de whisky, cajas de cervezas, garrafas de licor café, cajas de langostinos, de costillas de cerdo y de refrescos, todo valorado en 800 euros.
El suceso se produjo hace casi un mes, aunque la policía nacional consiguió localizarlo hace apenas unos días. Ya ha pasado a disposición judicial.
Pillados ‘in fraganti’
Los agentes los cogieron dentro de un bar situado en la calle Vázquez Varela con el cristal de la puerta de entrada roto, un trozo de loseta dentro entre los cristales y la caja registradora abierta. Y además llevaban encima un destornillador, un fleje, varios billetes y monedas de euro.Los hechos pasaron el 2 de abril y los dos detenidos, de 26 y 23 años, ya han pasado a disposición judicial. Al segundo de los arrestados, de Santa Cruz de Tenerife, le constan 13 detenciones anteriores.
Roba en el gimnasio y sigue como si nada
Le robó un teléfono móvil y una bufanda de la taquilla a una de las mujeres que estaba en el gimnasio, metió las cosas en la suya y siguió haciendo ejercicio como si nada. La clienta del gimnasio, en la Avenida da Florida, llamó a la policía al notar que le faltaban estos efectos y tras varias averiguaciones los encontraron en poder de otra mujer de 19 años que estaba en ese momento en el centro.
