No se ha confirmado si la vicepresidenta Salgado ha leído una pintada que hay en Tomás Alonso y que pone “La crisis nacional que a pague o capital”, pero la subida de impuestos anunciada por el presidente Zapatero afectará a los millonarios. Porque así siguen llamándose los que tienen más de un millón de euros y que serán los afectados por un recargo extraordinario que gravará a aquellas personas cuyos ingresos, ahorros, acciones y propiedades superen el millón, más de 1,2 millones de españoles.
Para ello, tras pasar por el Consejo de Ministros a principios de junio, la nueva tasa, que para su aplicación requiere una norma con rango de ley, sería presentada al Congreso y tramitada de urgencia para que pudiese entrar en vigor a finales de este año. Se trataría de un impuesto similar al del Patrimonio y completaría las medidas que se adoptarán para atajar el déficit de las arcas públicas, de un 11%: recorte de un 5% del sueldo a los funcionarios, congelación de la subida de las pensiones, retirada del cheque bebé o suspensión de inversiones y gasto público en una cantidad superior a los 12.000 millones de euros.
A dichas medidas, que para su aplicación en países como Francia requerirán una reforma constitucional (anunciada hoy por el presidente Sarkozy) se añadirán la reforma de los contratos de trabajo, la posible retirada de las ayudas del Plan 2000 E para la compra de automóviles, el fin de las ayudas del Plan E y la próxima subida del Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).