Aprovechaba sus permisos carcelarios para dedicarse a robar las piezas de acero inoxidable que adornan las paradas de autobús de Vitrasa. El hombre, de 40 años, fue detenido tras una investigación por parte de la Policía Local que comenzó el pasado mes de octubre y que necesitó de mucha “paciencia y perseverancia”.
El modus operandi del ahora detenido era siempre el mismo: durante sus permisos aprovechaba para sustraer todos los elementos de este material en ocasiones de hasta 14 paradas en una jornada. El hombre cortaba las chapas metálicas en retales para facilitar su transporte y luego venderlas. Y siempre actuaba en el rural, sobre todo en Bembrive, Beade y Valladares.
En total, A.A.L.V. robó 87 unidades con un coste cada una de casi 300 euros, a lo que hay que sumar los gastos de reposición. La broma de estos “paseos rurales visitanto las paradas del bus” ha salido por 34.800 euros.