Vigozoo tiene desde el pasado 21 de mayo un nuevo inquilino: una cría de buitre leonado. Ha tardado 62 días en salir de su huevo antes de ver la luz en el zoo vigués y todo gracias a la incubación artificial para evitar el abandono del nido por parte de los padres y asegurarse de que la cría salía adelante.
Los padres son aves irrecuperables para la vida salvaje que proceden de la red andaluza de centros de recuperación de especies amenazadas, un tipo de aves que es muy difícil que se reproduzcan en cautividad. Este es el tercer intento de cría dentro de Vigozoo, el primero con éxito. Algo que cobra más importancia si cabe porque se trata de una especie protegida englobada en el Programa Europeo de Cría en Cautividad de Especies Amenazadas.
El buitre leonado es una de las mayores rapaces de la Península Ibérica, superando al águila imperial, y es una de las pocas especies de buitre que se pueden ver en Europa junto con el negro, el quebrantahuesos o el alimoche. Es un ave planeadora que apenas mueve las alas en el aire y que prefiere levantarse sobre las corrientes ascendentes de aire caliente y que puede pasar horas volando en busca de animales muertos de los que alimentarse.