El Ejército norcoreano ha advertido hoy que si Corea del Sur comienza su anunciada campaña de propaganda contra Pyongyang, no sólo atacará los altavoces que han sido colocados en la frontera entre ambos países, sino que podría convertir la capital, Seúl, en un “mar de llamas“.
La tensión ancestral entre ambos países se ha incrementado tras el hundimiento del buque de guerra surcoreano ‘Cheonan’ en marzo, causado, al parecer, por un ataque norcoreano. Pyongyang ha negado implicación en el incidente, pero Seúl ha comenzado a responder con la instalación de varios altavoces en 11 puntos a lo largo de la Zona Desmilitarizada.
El Estado Mayor del Ejército de Corea del Norte ha respondido con un comunicado en el que advierte de que “el contraataque militar de la República Popular Democrática de Corea (Corea del Norte) sería un ataque despiadado que incluso contemplaría convertir a Seúl, el bastión de los traidores en un mar de llamas”.