Los sindicatos han convocado una jornada de huelga general en España el día 29 de septiembre. Será su manera de protestar contra la reforma laboral del Gobierno. Tras analizar las 41 páginas de la reforma, los sindicatos mayoritarios presentarán de forma conjunta las medidas a tomar para que nadie lo vea como algo partidista o interesado, lo que cuestionaría el papel de los sindicatos.
En esta reforma laboral se contempla un abaratamiento del despido y la penalización de la contratación temporal. Una propuesta que tampoco ha convencido a los empresarios, que consideran que no aclara ni las causas ni los procedimientos para la extinción de los contratos.
Una reforma que el Ejecutivo acaba de anunciar que no se hará por decreto sino como proyecto de ley, aunque la aclaración llega tarde. El decreto se aprobará el miércoles pero de manera provisional mientras no se tramita la ley, algo que se puede demorar hasta noviembre. En el momento en que esta entre en vigor se derogarían los aspectos contradictorios del decreto.
No será la primera
La convocatoria no será la primera a la que se enfrentan los españoles, sino la quinta. La primera fue en 1985, liderada por Marcelino Camacho, que convocó la primera huelga general de la democracia para protestar contra la reforma de las pensiones que en ese momento quería llevar a cabo el gobierno de Felipe González, aunque UGT no apoyó la convocatoria.
Ya en 1988 llegó el gran parón, con 8 millones de personas secundando un paro convocado por ambos sindicatos contra la política económica y laboral del Partido Socialista. Luego llegaron los cuatro paros generales en Galicia, Asturias, Cantabria y Cartagena por la desindustrialización y la falta de alternativas a la pérdida de empleo en estas regiones.
La última huelga general convocada fue en la era Aznar, el famoso 20-J de 2002, contra la reforma del sistema de protección del desempleo.
