Crisis, excepto en el gobierno local. Así podría resumirse el acto en el que la coalición PSOE-BNG ha conmemorado en el remodelado auditorio del Concello los tres años de gestión al frente de la ciudad. El mismo, que ha servido de punto de arranque a la campaña electoral de las próximas Municipales, como dejaron claro los discursos del teniente de alcalde, primero, y del alcalde, después.
Rodeado de todos los concejales de su gobierno, incluso de los ausentes, María Moure y Carmela Silva, a los que recordó en su intervención, y de representantes del mundo empresarial, excepto los presidentes de la CEP y la Cámara de Comercio, sindicatos, aunque no estaban los máximos representantes de UGT y CCOO de la ciudad, Justicia, aunque faltó el juez decano, asociaciones de vecinos, sin contar con que no había nadie de la FAVEC, y ante un aforo que no se llenó, Abel Caballero, apoyándose en una cuidada presentación audiovisual, presentó la actuación de “un goberno que fixo o que ningún outro fixera antes”.
El alcalde desgranó sus logros desde la humanización de calles, mostrando el antes y el después tras las obras, la construcción de 118 parques infantiles “posiblemente a cidade que máis abriu en Europa”, zonas verdes, más de 1.500 bancos, 500 becas de inglés, la promesa de que “ningún neno se quedará sen becas para comedor nestos tenpos nos que a crise acecha”, alcanzando un número que se acerca a las 1.500, más de 20.000 vigueses participando en actividades saludables, la apertura del mayor local de ensayo de Galicia en el Parque Tecnolóxico de Valladares, o la creación de 8.297 “postos de traballo directos” en los dos últimos años, fueron algunos de los puntos que aparecían en la pantalla de más de 8 metros de largo por 3 de alto que Caballero manejaba con un mando a distancia.
No faltaron referencias al Plan Integral de Igualdade, las ayudas al comercio “máis de 2,5 millóns de euros nestos tempos de crise”, al Turismo “por medio do Plan Integral de Competititividade no que investimos máis de 4 millóns”, la mejora del tráfico, el deporte, la Cultura, “coa nova pinacoteca ou a recuperación de Toralla e O Castro”.
Caballero hizo especial mención a las demandas históricas que, aseguró, su gobierno deja resueltas, desde la aprobación del Plan Xeral, pasando por la llegada del AVE por Cerdedo “que nos levará a Madridd en 2horas e 35 minutos”, la ampliación del Puente de Rande “que empezará coa colocación da primera pedra en marzo do ano que ven”, las autovías a Porriño y Pontevedra “que xa teñen os proxectos licitados”, la autopista del mar, el nuevo Juzgado de lo Mercantil y los registros civil y mercantil, además de la biblioteca del Estado, “están xa funcionando , encamiñadas ou en vías de inaugurarse”.
El alcalde agradeció a su socio de gobierno “a súa inmensa capacidade de xestión” y resaltó su “excepcional xenerosidade y man tendida” y señaló al final de su intervención, sacando a la señora de Caballero, parecida a la niña de Rajoy, pero de Vigo y con 45 años y que siempre se cruza con él cuando se dirige a un acto importante para decirle ‘siga así, alcalde, siga así‘, que “este Vigo de hoxe é o que amosa o potencial da cidade, o que desexábamos o que empeza a sorrir”.
Eso sí, ni sombra de autocrítica, ni después de que uno de los vecinos de Barreiro interrumpiese el acto para preguntar a todos los concejales “¡¿cómo es posible que hayan dado la licencia para las nuevas viviendas sin permiso para la luz? ¿quién va a pagar ahora los 36.000 € que cuesta el enganche?”