Ser cocinero de Bin Laden, aunque a uno se le den bien las cazuelas y el mortero, el de machacar, claro, tiene sus consecuencias. De ello sabe Ibrahim al Oossi, el que fuera chef de Osama Bin Laden, que ha sido condenado a 14 años por el tribunal norteamericano de Guantánamo.
Al Qosi, que está recluido en aquella base estadounidense, en Cuba, se ha declarado culpable de ayudar a cometer actos terroristas, una confesión que habría pactado con el fiscal de su caso y que podría haber supuesto una reducción de doce años de condena. Al Oosi, que además de cocinar para Bin Laden, también fue su chófer y, en varias ocasiones, parte de su equipo de seguridad, fue trasladado a Guantánamo hace cinco años.