Primer aviso: la tarifa plana es muy cara. Telefónica ya ha dejado caer que no compensa el crecimiento de tráfico, el coste de la red, los ingresos que generan y la tensión de la inversión con el desigual uso de la red que hacen los usuarios. Eso sí, dicen que los cambios son pensando en el cliente: ahora el usuario subsidiario está pagando lo mismo que el que más usa la red. Las cifras aseguran que el 5% de los que se conectan producen el 75% del tráfico.
La opción sería cobrar más a los que más descargan, segmentar las tarifas o penalizar el “consumo excesivo” con limitaciones de velocidad. Y el futuro no espera: se espera que para 2020 haya 50.000 millones de dispositivos conectados.