El Rey no sólo no tiene cáncer sino que está completamente restablecido de la operación a la que se sometió el 8 de mayo y en la que se le extirpó un nódulo pulmonar benigno. Así se ha asegurado hoy en un comunicado enviado desde el Palacio de la Zarzuela en el que se informa que el martes y miércoles se le hizo a Don Juan Carlos un TAC que ha confirmado “la correcta cicatrización de la zona pulmonar intervenida, así como una completa recuperación del proceso”.
Según los doctores Laureano Molíns, jefe de Cirugía Torácica del Hospital Clinic de Barcelona, y Avelino Barros, jefe del servicio médico de la Casa del Rey, Su Majestad no tendrá que someterse a más revisiones por esta causa.
El Rey, que en enero cumplirá 73 años, ha sido operado en varias ocasiones, en cuatro de ellas por lesiones que se produjo practicando deporte, una más para quitarle unas varices y la extirpación del nódulo, hace 4 meses. Además, hace poco tiempo se ha sabido que necesita sendos audífonos para superar la pérdida de audición y que ha dejado de fumar, un vicio que tenía desde hace más de 50 años.
Además de ello, se sabe que Don Juan Carlos ha pasado por el quirófano debido a problemas de oído, concretamente mientras estudiaba en Suiza, sufrió una hepatitis durante su estancia en la Academia Militar de Zaragoza, padece problemas crónicos de espalda a causa de un golpe que se dio mientras navegaba y tiene brotes de herpes que le obligan a dejarse barba cada cierto tiempo.
Sin embargo, su salud siempre ha dado lugar a polémica. La más antigua es la desaparición de su historial médico de la consulta del doctor Gil-Vernet, ya jubilado. El mismo contenía los resultados de las pruebas que se le realizaron entre 1984 y 1994. También se ha especulado con su supuesta hemofilia, una dolencia común en su familia y que ha sido desmentida y recientemente se ha comentado que sufre problemas de próstata, algo que no sería extraño en un hombre de su edad.
Sin embargo, la operación de mayo ha dado lugar a todo tipo de rumores que su aspecto ha alimentado. El Rey ha aparecido excesivamente hinchado en las últimas semanas, se le vio subiendo con dificultad las escaleras de entrada a la catedral de Santiago el pasado verano, camina completamente rígido y apenas gira el cuello.
