Está claro que el que no se vende es porque no quiere. La Policía Nacional ha detenido a un hombre en Sevilla y a su mujer al ser pillado repartiendo octavillas ofreciendo descuentos de cinco euros por cada gramo de cocaína que se les compara. Y, aunque no los hubieran cogido ‘in fraganti’ habrían acabado en el calabozo, ya que en los panfletos dejaban bien visible su nombre y su dirección. Él hacía el reparto de publicidad y ella se encargaba de transportar la droga y de distribuirla, la mayoría en locales de ocio.