Esa es la decisión que ha tomado la Fiscalía de Sevilla quien ha indicado que el mismo no supone la persecución de un delito, ni la apertura de una investigación, sino que se hace para “proteger tanto a la madre como al recién nacido“. El fiscal está a la espera de recibir los informes que ha pedido al los servicios sociales del Ayuntamiento de Lebrija, donde reside la niña con su familia, y que indicarán si está escolarizada y qué asistencia médica han recibido, tanto ella como su bebé.El ayuntamiento ha enviado una nota a los medios de comunicación en el que deja claco que desde la Alcaldía y la Concejalía de Servicios Sociales y Comunitarios “se han realizado todas las actuaciones pertinentes una vez se conoció el mencionado hecho”. Por otra parte, un pediatra ha examinado hoy a la pequeña de 10 años y a su recién nacido, para verificar que se encuentran en buen estado.
