Pudo hace saltar por los aires a toda la cúpula de ETA, pero no dio la orden. Eso asegura el ex presidente González en una entrevista publicada por ‘El País’. Felipe indica que los servicios de inteligencia le informaron de que los máximos mandatarios estaban reunidos en el sur de Francia y que había una posibilidad de matarlos a todos, “una sola oportunidad”, pero dijo que no.El ex presidente, que sitúa la fecha de esta reunión entre 1989 y 1990, indica que sabía que no podían detenerlos porque no estaban en territorio español, que había pocas posibilidades de que lo hiciesen las autoridades francesas y que la única posibilidad era volar la casa en la que se reunirían, “la decisión era sí o no, y aún hoy no sé si hice lo correcto”.González añade que en su decisión no pesaron “motivos morales” y que luego le torturó pensar “cuántos asesinatos de personas inocentes podríamos haber evitado”.
