Esa es la cantidad que recibe actualmente el policlínico de la Consellería de Sanidade por hacerse cargo de los pacientes que no pueden ser atendidos en los hospitales públicos, una cantidad que la Xunta no está dispuesta a incrementar. Así de claro lo ha dejado la delegada del gobierno autonómico en Vigo después de recibir a representantes de la plantilla.
Estos le han entregado a Lucía Molares más de 1.000 firmas a favor de la calidad del servicio que presta el hospital y de los esfuerzos que se han hecho pata mejorar su competitividad. Sin embargo, Molares ha sido muy clara, y después de indicar que la actual situación económica no está para subidas, recordó que el gobierno Touriño ya había aumentado la dotación a Povisa en un 40%.
Eso sí, la delegada aseguró que la Xunta no ha hablado nunca de bajar la actual cuantía y se ha mostrado por que las partes, que vuelven a reunirse mañana, hagan esfuerzos y cedan para acercar posiciones, cesiones que podrían darse, apuntó en la duración del convenio, que el Sergas estaría dispuesto a que fuese de 10 años y la forma de pago, pasando a hacerla en función de tarjetas sanitarias.
Sin embargo, a lo que Molares se mostró totalmente contraria es a que se vincule el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) al concierto, ya que, como dijo ayer “es posible prorrogarlo mientras se negocia” y dejó claro que Sanidade tiene voluntad de mantener el acuerdo con el hospital, por lo cual el despido de 1.200 trabajadores está, a su juicio, injustificado.
