Este hombre de Dios, según fuentes de la Guardia Civil de Pontevedra citadas por el diario ‘Levante EMV’, sería quien habría descargado archivos de contenido pedófilo desde el ordenador de la parroquia valenciana de Sant Jaume Apóstol, en Algemesí, donde ejercía su labor pastoral.
La imputación del religioso ha sido realizada por agentes del grupo de delitos telemáticos de la Guardia Civil de Pontevedra, que se desplazaron la semana pasada a Valencia, por orden del juez de instrucción número 3 de Cangas, que instruye las diligencias de la operación ‘Telémaco’.
El Arzobispado de Valencia ha enviado a los medios una nota en la que deja claro que, “desde el mismo momento en el que el arzobispo tuvo conocimiento de la existencia de la investigación sobre el sacerdote, hace cuatro semanas, atendiendo a la normativa canónica, decretó su inmediata salida de la parroquia y el cese de su oficio pastoral“.