O lo que es lo mismo: cada día de noviembre, 260 gallegos se quedaron en la calle. Este número supone un aumento de casi el 7% con respecto al mismo mes del año pasado y eleva el número de personas que buscan trabajo hasta los 231.721. De todo el desempleo que se generó en España los pasados 30 días, casi el 33% fue en Galicia, lo que significa que la comunidad, que hasta hace seis meses era de las que mejor resistía la crisis, se ha puesto a la cabeza del Estado en la destrucción de empleo, un dato que se vuelve aún más preocupante si se considera que en más de 90.000 hogares gallegos no trabaja ninguno de sus miembros, el número más alto desde que se elaboran las estadísticas del paro.