Dos leyes enfrentadas, la ordenanza municipal del Concello de Vigo y la Ley de Protección de Animales, y una queja que llega hasta el Valedor do Cidadán. Amigos da Terra ha presentado ante este órgano una queja formal por la prohibición en el concello vigués de alimentar a los gatos callejeros, ya que al no haber por parte del área de Medio Ambiente del Concello un órgano encargado de dar de comer a las colonias de gatos que habitan en la ciudad debe prevalecer la “responsabilidad ética de cada ciudadano”.