Es un dato estadístico: las mujeres viven más. Exactamente cinco años más que los hombres. Sin embargo, en cuanto a calidad de vida ellos se llevan la palma. Un estudio del Instituto de la Mujer desvela que ellas viven con peores condiciones de salud, lo que incluye el bienestar emocional, social y físico: ellos tienen 56,3 años de vida con buena salud, mientras que en las mujeres la cifra se reduce hasta los 53,9.
Y, mientras el cáncer es el primer causante de hacernos perder años potenciales de vida, los principales culpables en la muerte de las mujeres se encuentra en los problemas de circulación, los tumores y las enfermedades del aparato respiratorio. Pero lo que es peor: una de cada tres mujeres asegura que los problemas de salud han limitado su día a día desde los 16 años. Y es que la probabilidad de tener alguna enfermedad crónica está 13 puntos por encima en el caso del sexo femenino. Ellas consumen casi el doble que los hombres de pastillas para el dolor, aunque las más habituales en sus bolsos son los tranquilizantes, relajantes y pastillas para dormir.