Nuestro gozo en un pozo. Si alguien estaba deseando que llegara el fin de semana después de una semana ‘morrendo’ de calor, lo sentimos, pero una señora borrasca se va a llevar el aire africano a otra parte. Los cientos de vigueses que esta tarde abarrotaban las playas se han llevado los últimos rayos de sol: ya esta tarde se notaba un ligero descenso de las temperaturas comparado con las sufridas ayer, pero lo gordo va a llegar mañana, con un bajón de hasta 10 grados en las máximas, nubes y con la posibilidad de que alguna que otra gotilla nos agüe este regustillo a verano que estábamos cogiendo.
El domingo y el lunes vuelven a subir las temperaturas máximas, hasta los 23 grados en las Rías Baixas, y a despejarse los cielos, ya que la borrasca no va a acabar de asentarse en la comunidad gallega, según las predicciones de Meteogalicia. Es lo que tiene el verano de los ricos…