Ni medidas de seguridad, ni despliegue policial ni farrapo de la gaita. Las trabajadoras que se encargan de la limpieza de los colegios públicos de la ciudad han vuelto a suspender el Pleno del Concello. Es la cuarta vez (después de las de 29 de noviembre de 20010, 31 de enero y 7 de febrero de este año) que lo consiguen en los últimos cinco meses y todo para reclamar que la concesionaria del servicio, Linorsa, cumpla las promesas que hizo hace dos meses y que llevaron a la desconvocatoria de una huelga que ya duraba 23 días.
Esta vez, las trabajadoras entraron como parte del público y cuando los concejales tomaron la palabra los interrumpieron reclamando que se cumplan los acuerdos al tiempo que acusaban al alcalde de preocuparse más por sí mismo y por hacer propaganda de sus obras que por solucionar los problemas que la plantilla de Linorsa está arrastrando desde hace meses, por ello, Abel Caballero decidió dar por terminada, la que debía ser la última reunión de este mandato, cerca de las 10 de la mañana.
Entre ellos están los cambios en los horarios, ampliación de la jornada para tres de ellas, a fin de que puedan completar su jubilación y la readmisión de una compañera que fue despedida. Esta nueva interrupción se produce después de las reiteradas peticiones para intervenir en el Pleno, algo que han solicitado al concelleiro de Traballo, Santos Héctor, quien, aseguran, “no ha movido un dedo, esperando que todo pasase antes de que lleguen las elecciones (municipales)”.