Sabía que era el objetivo número uno de Estados Unidos, así que se hizo un hueco en el lugar más recóndito del planeta para intentar escapar. Osama Bin Laden, líder de Al Qaeda, vivió durante más de dos años en zonas tribales montañosas de Pakistán, en un pequeño pueblo cercano a Abbottabad, hasta donde se trasladó en 2005 para residir en el complejo de lujo en el que fue abatido hace unos días.
Su esposa, bajo custodia policial, aseguró que desde 2003 Bin Laden estuvo viviendo en Chak Shah Mohamad antes de intentar integrarse en un entorno urbano, un fortín a tan sólo un par de kilómetros de la Academia Militar de Pakistán en la que pasó totalmente inadvertido para todos, incluidos los servicios de inteligencia pakistaníes.