Más de 2.500 millones de euros menos de lo que se esperaba. La Unión Europea ya ha aprobado el plan de rescate a Portugal, al que se le echará una mano con una inyección de 78.000 millones de euros en un paquete de préstamos de los que España correrá con casi el 12,5%, es decir, unos 3.250 millones de euros.
La UE será la que desembolse la mayor parte del dinero, 52.000 millones de euros, que saldrá a partes iguales de los fondos de la Comisión Europea, de los Estados no rescatados y del Fondo Monetario Internacional. A cambio, un duro programa de recortes que tiene como base el plan presentado por Sócrates antes de pedir socorro a los 27 con ajustes en gasto, privatizaciones y reformas en el mercado laboral. Ahora, lo más duro, será negociar con los bancos para que no vendan la deuda lusa.