Sigue sedado, con respiración asistida y estabilidad hemodinámica. Hoy se cumple una semana desde que el extorero y ganadero José Ortega Cano ingresara en el hospital Virgen de la Macarena de Sevilla tras chocar frontalmente contra otro vehículo de madrugada por causas que se desconocen, a pesar de que las primeras voces alertaban de un posible exceso de velocidad y de alcohol en sangre. En el siniestro perdía la vida un hombre de 45 años, que fallecía en el acto.
El matador sigue estable dentro de la gravedad en la Unidad de Cuidados Intensivos y sin grandes cambios, a pesar de que la familia aseguraba hace unos días que había abierto los ojos y los había reconocido.