Eso ha asegurado el piloto español de Ferrari, poco dado a la euforia quien, como sus rivales, Sebastian Vettel y Max Webber (Red Bull), han reconocido que el monoplaza ha evolucionado mejor que sus competidores. El rendimiento del Ferrari se notó en primer lugar, cuando Alonso superó a Hamilton (MacLaren), “Lewis me adelantó cuando iba cuarto pero con la pista seca sabía que podía adelantarle, utilicé el DRS y KERS y lo adelanté”, aseguró y, luego, cuando se impuso a los intratables Red Bull “después del inicio difícil de temporada con Red Bull dominando todas las carreras, nos sacaban segundo y medio y hoy les hemos sacado 20 segundos“, señaló.
A pesar de la última parte de la carrera en la que Alonso no tuvo oposición en su camino hacia la victoria, el asturiano reconoció que la prueba fue complicada, “las condiciones fueron muy distintas de principio a fin: primero la pista mojada luego un poco más seca y, sabiendo que el coche tenía ritmo de victoria, sólo me quedaba no cometer errores”.