Ya sabíamos que una copa de vino, en la comida, es buena para la salud, como el aceite de oliva, el brécol o ser millonario…ahora se suma a esa lista la cerveza. Y no sólo para los acodados profesionales, sino para las personas mayores. No lo decimos nosotros, que hemos quedado cuando nos toquen las vacaciones con varias rubias, sino el profesor Jesús Román Martínez, del Comité Científico de la Sociedad Española de Ciencias de la Alimentación.
La birra, dice en su trabajo ‘Cerveza, hidratación y mayores’, aporta más de 2.000 elementos con un especial interés nutritivo como vitaminas del grupo B, especialmente, ácido fólico, fibra, minerales tan interesantes para el organismo, como el silicio, potasio y magnesio y, encima, como el 92% de la cerveza es agua, ayuda a evitar la deshidratación.
Además de todo ello, la cerveza previene enfermedades cardiovasculares, neurodegenerativas o relacionadas con los huesos, e incluye nutrientes y líquidos fundamentales para el buen funcionamiento del organismo.
Eso sí, no vale consumirla en plan Homer, con una o dos cañas para mujeres y dos o tres para hombres, preferiblemente, acompañada de alimentos, está bien.
