Y no es lo que lo digamos nosotros por decir, no. Esto es lo que le espetó esta mañana a la cara el candidato socialista a la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, al jefe del Ejecutivo, José Luis Rodríguez Zapatero. “Me voy a tomar un café que me duermo“, han logrado captar las cámaras de televisión cuando se disponía a entrar en el hemiciclo del Congreso el presidente del Gobierno.
La votación parlamentaria ha logrado sacar adelante la toma de consideración de esa reforma de la Constitución española para fijar el límite del déficit público en un 0,4%. Para ello se tendría que modificar el artículo 135 de la Carta Magna aprobada en 1978.
Un total de 319 diputados han votado a favor de que se tome en cuenta esa modificación de la Constitución, 17 lo han hecho en contra y otros 2 se han abstenido. Esto se traduce en que este viernes, día 2, se votará ya dicha reforma.
PSOE y PP, además de UPN, se han mostrado a favor de esa modificación de la Carta Magna, mientras que están en contra IU, BNG, PNV, ERC, CiU, UPyD y Nafarroa Bai.
Sin duda, la anécdota de la mañana ha sido la protagonizada por Rubalcaba que, aprovechando las intervenciones de los portavoces de CIU, ERC e IU-ICV, se fue a meter un cafetito en vena para poder despertar.
Hay que decir que Rubalcaba ha mantenido en los últimos días reuniones maratonianas con sus colegas socialistas para explicarle los entresijos de esa modificación de la Constitución española, por lo que el cansancio es entendible.
