Ha sucedido en el Reino Unido, una esteticista de 37 años dice someter a sus hijos de 4, 6 y 10 años a tratamientos de belleza, porque según ella, así aumentarán la confianza en si mismos.
Las críticas no se han hecho esperar por los grupos de la defensa de la infancia, que no dudan en denunciar los hechos y los comparan como una práctica de “prostituir” a los niños.
Jools Willis, que así se llama la madre, afirma que son sus hijos los que quieren lucir igual de bien que los clientes de su salón de belleza. El motivo no es otro afirma, que el impulsar la confianza de los menores y hacerles sentir bien.
Esta práctica no es aislada, dado que como ya publicamos en vigoalminuto.com, otro caso parecido salía a la luz pública hace unos meses, era el caso de otra estilista que retocaba a su hija menor con botox, que finalmente había llegado a perder su custodia.