Llevaba 33 años esperando este momento y, finalmente, esta madrugada fue ejecutado en una cárcel de Florida. Hablamos de Manuel Valle, natural de Cuba, que fue condenado a pena de muerte por el asesinato a un policía cometido en 1978.
El cubano, de 61 años, llevaba más de 3 décadas en el corredor de la muerte y esta madrugada (hora española) dejó de vivir en la prisión estatal de Starke, en el norte de Florida.
Valle se ha convertido en el primer reo condenado a muerte al que se le ha adminsitrado una inyección combinada de sustancias letales como el pentobarbital, un medicamento que en EE.UU. se utiliza contra la epilepsia.