Eso ha asegurado el viceportavoz de la Unión Cristiano Demócrata (CDU), el partido de la canciller Angela Merkel. En una entrevista que publica este lunes el diario alemán ‘Rheinische Post‘, Michael Fuchs asegura que “probablemente no haya otro camino para nosotros más que aceptar al menos la condonación del 50% de su deuda”.
Las declaraciones de Fuchs adquieren visos de realidad, no sólo porque se trata de un destacado dirigente de la CDU, sino porque coinciden con las previsiones anunciadas este domingo por el Ministerio de Finanzas de Grecia que, pese a despedir a más de 30.000 funcionarios, no cumplirá las previsiones de déficit no este año ni el que viene: en 2011 superará el 8,5%, un 1% por encima del 7,6% comprometido con la Comisión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional, y en 2012 estará en 6,8%, un 0,3% sobre el 6,5% al que se comprometió el gobierno Papandreu para acceder al segundo rescate.