Han tenido ya dos semanas de entrenamientos para conocer a sus nuevos compañeros, el cuerpo técnico y la ciudad. Han tenido, incluso, la posibilidad de disputar dos encuentros amistosos con su nuevo equipo, ambos saldados con victoria. Por eso, ya era hora de que las dos últimas incorporaciones del Aldasa Amfiv para la temporada 2011-2012, el iraní Morteza Gharibloo y el turco Omer Gurkan, cumpliesen con el obligatorio trámite de su presentación ante los medios de comunicación para explicar los motivos que les llevaron a aceptar la oferta viguesa y sus primeras impresiones sobre el club y la ciudad.
Lo hicieron acompañados por el director deportivo del Aldasa, José Antonio Beiro, y por el segundo entrenador, Óscar Carbajo, quienes resaltaron las cualidades de ambos jugadores y su progresiva adaptación al grupo a pesar de la barrera idiomática, especialmente en el caso de Gurkan, quien sólo habla turco.
Precisamente, el máximo responsable deportivo del conjunto vigués fue el encargado de presentar a los medios de comunicación a los dos nuevos jugadores. “Morteza es un clase 4 iraní que disputó los últimos años la Liga italiana siempre con alguno de los cuatro mejores equipos. Es un jugador fundamental en su selección, con la que ha disputado dos Juegos Olímpicos, y pensamos que tras la baja de Lorenzo Envó está llamado a ser nuestra referencia esta campaña y esperamos que así sea.
Omer es un jugador turco clase 4,5, que llega procedente del actual campeón de Europa, el Galatasaray. Es un jugador interior pero en su caso valoramos un poco más el potencial de futuro porque es muy joven pero apenas lleva tres años jugando en silla, aunque cuenta con la experiencia de venir de un equipo en el que estaban tres o cuatro de los mejores jugadores del mundo”, resalta José Antonio Beiro, quien agradeció la colaboración brindada por Morteza para facilitar la adaptación del joven pívot turco de 2,16 metros de altura. “Después de lo que hemos visto en los entrenamientos de estos días, está claro que el potencial está ahí pero contamos con el problema del idioma puesto que Omer únicamente habla turco. Sin embargo, gracias a Morteza, que tenemos la fortuna de que habla algo de turco, las cosas son un poco más fáciles, especialmente para el jugador, que es la primera vez que va a jugar fuera de su casa y está un poco temeroso y expectante con la situación”.