Dos obras para acabar con la escasez de agua de Vigo y su área. Eso es lo que el alcalde propone a la Xunta y al Ministerio de Medio Ambiente. La primera, según ha explicado, consistiría en una conducción, que debería aprobarse ya por la vía de urgencia, desde los ríos Oitavén y Verdugo, hasta la presa de Eiras. Esta idea una inversión de 5 millones, si no llueve en los próximos días, “si lo hace, tendría un coste cero”, ha subrayado Abel Caballero. Para ponerla en marcha ha pedido una reunión con el conselleiro Hernández, “antes de una semana o 10 días”, porque para realizar la obra se necesitarían unos 45 días y, “pasado este plazo, si no llueve lo suficiente, no habría marcha atrás y Vigo y su zona de influencia se quedarían sin agua”.
Este asunto será trasladado en el encuentro con el presidente de Augas de Galicia y la delegada de la Xunta en Vigo que se celebrará este martes y al que acudirá la primera teniente de alcalde, Carmela Silva, y el edil de Fomento, David Regades.
Por si esta solución no fuese suficiente, al mismo tiempo Caballero ha enviado una carta a la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Rosa Aguilar, al secretario de Estado de Medio Ambiente y al presidente de Acuanorte para proponerles que empleen parte de los remanentes que han sobrado por la rebaja en la licitación de la nueva depuradora de Vigo, que él estima en unos 30 millones, para poner en marcha una obra “definitiva” que garantice el abastecimiento “los próximos 50 años”.
