“Estamos en situación de emergencia”. Eso aseguró este jueves la primera teniente de alcalde en relación con el suministro de agua, al tiempo que calificó la actuación del gobierno local en este asunto con una “matrícula de honor”, y que este había tomado “todas las medidas a nuestro alcance y cuando había que tomarlas”. Palabras que ratificaban las del alcalde…o no puesto que, dependiendo del día, declaraba que se había cortado “sin decírselo a nadie” el baldeo de calles, luego que la situación no obligaba a tomar medidas, después se cortó el riego de jardines, más tarde el de las fuentes y, por último, hace 15 días, se inició una campaña “en varios medios de comunicación” recomendándonos, con el escudo de Alcaldía, que nos duchemos, mejor que bañarnos, que llenásemos la lavadora o que arreglásemos todos grifos de casa, que ‘A auga escasea!”.
Parece ser que una cosa es lo que dice Caballero y otra lo que hace. La prueba es ésta: esta mañana, se regaban los setos centrales de Rosalía de Castro, como puede apreciarse en la fotografía, una operación que se lleva a cabo, también en otras partes de la ciudad, como Gran Vía o Martínez Garrido, como ha comprobado esta redacción. Según ha sabido vigoalminuto, los vehículos empleados para ello llevan un depósito de 5.000 litros de agua, lo que asegura la campaña de la Alcaldía que podemos ahorrar al mes cambiando la ducha por el baño o los que gasta una cisterna normal en casi 6 meses.
Por si esto no fuese suficientemente ilustrativo de las ‘medidas efectivas’ que ha adoptado el alcalde para ahorrar agua, la asociación ecologista ‘Amigos da Terra’ indica que las mismas, pese a la urgencia anunciada por Abel Caballero, se aplicaron la semana pasada y que, de haberse tomado esta decisión hace 3 meses “las reservas de agua, a día de hoy, serían entre un 10 y un 15% mayores”. Esto significa que el embalse de Eiras, que está al 44,3%, podría llegar al 59%, y el de Zamáns, que no llega al 37% de su capacidad, podría acercarse al 50%.