El que parece que será el último fin de semana caluroso antes del cambio de tiempo típico de la estación otoñal en la que estamos está siendo otra jornada negra en cuanto a fuego en el monte se refiere.
Según ha informado hoy la Consellería de Medio Rural 4 nuevos incendios forestales están activos en estos momentos en la provincia de Ourense que, una vez más sigue siendo la más afetada.
Se trata de los fuegos que siguen adelante en las localidades ourensanas de Paderne de Allariz y Esgos, en Monterroso (Lugo) y en la parroquia de Campañó (Pontevedra), afectan en total a más de 110 hectáreas. Desde la Xunta se está casi convencido de que todos ellos han sido provocados por incendiarios.
También permanecen activos dos incendios registrados desde este jueves en la parroquias de Cernado, en Manzaneda y San Paio de Araúxo, en Lobios (Ourense), que han quemado superficies superiores a las 100 hectáreas en ambos casos.
Por su parte, se encuentran en fase de control sendos fuegos iniciados el jueves en Vilar de Barrio y el martes en San Cristovo de Cea, en la parroquia de Oseira. Han calcinado unas 20 hectáreas, en el primero de los casos y 156 hectáreas.
En Paderne de Allariz, en la parroquia de Cantoña, las llamas se declararon a las 16:30 horas del viernes y, según las primeras estimaciones provisionales, su afección se sitúa en torno a las 20 hectáreas. En el operativo de extinción trabajan un agente forestal, una brigada, un Grumir, tres motobombas, un avión y un dispositivo de la Unidad de Emergencia Militar (UME).
Ya en el de Esgos, en la parroquia de Pensos, el incendio se decretó a las 21 horas del viernes y también afecta a más de 20 hectáreas. Participan en las tareas para apagarlo cuatro agentes forestales, dos brigadas y cuatro motobombas.
En Monterroso, en la parroquia de Marzán, comenzó el fuego a las 21.40 horas del viernes y ha quemado unas 50 hectáreas. Contra las llamas luchan dos agentes forestales, siete brigadas, tres motobombas y dos palas.
En Pontevedra, en la parroquia de Campañó, el incendio se inició a las 1:49 horas. El humo es visible desde el centro de la ciudad del Lérez, que sobrevuelan dos helicópteros y cuatro aviones. También participan, sobre el terreno, dos técnicos, tres agentes forestales, ocho brigadas, cuatro motobombas y tres palas, que, con todo, no han podido evitar que ardiesen más de 20 hectáreas.